El día de tu boda es seguramente el más importante en tu vida. Y, por ello, en cuanto decidimos dar el gran paso, elegir el lugar donde vamos a celebrar el almuerzo o la cena es, seguramente, una de las cosas que más tenemos en cuenta, ya que quedar bien con los invitados nos parece fundamental para que se lleven un gran recuerdo de este día tan especial. El vestido de la novia y ágape serán los temas más comentados durante y después de ese día. Pero no basta con un banquete de lujo y abundancia, regado con los mejores vinos y el champán más prestigioso. Queremos que el lugar del evento sea un marco incomparable. Y, hoy en día, hay muchas fincas en plena naturaleza dotadas de todo lo necesario para la realización del banquete. El mismo catering para bodas dispone de varios de estos lugares con las características deseadas por los novios. Al elegir el catering de tu boda, has de tener en cuenta varios factores. La logística y calidad de las preparaciones son seguramente los dos más importantes.
Por otro lado, has de tener en cuenta los siguientes aspectos:
- La decoración del recinto: flores, centros de mesas u otros tipos de decoración, manteles, vajillas, cuberterías...
- La cantidad de personal, tanto camareros como cocineros, para la ejecución de un servicio dinámico, en el que todos los asistentes coman a la vez y los platos lleguen en perfectas condiciones de temperatura.
- Las materias primas. Que sean de calidad y naturales.
- Contar con la opción de confeccionar el menú a tu gusto y probar diferentes platos. Y, en la medida de lo posible, que estos sean los mismos que se sirvan en el banquete. Es decir, que la materia prima, las cantidades, el sabor y la decoración sean las mismas que se van a servir. ¡A veces hay sorpresas!
- Los servicios extras disponibles, como un cortador de jamón, un carrito de helados, una fuente de chocolate, photocall, babysitter...
- Poder elegir la ambientación del evento según el tipo de invitados: más informal, más chic, con alguna temática, etc.
- La opción de elegir el modelo de cena o comida: clásica, cocktail, buffet... Y si se ofrece barra libre y recena en la madrugada.
Un buen catering de bodas debe contar con muchos servicios y opciones disponibles, aparte de diferentes recintos: un castillo, una bodega, un palacio... Y en localizaciones diversas.
Antes de decidirte por un catering de bodas, las experiencias de amigos o familiares o tuyas propias van a ser los mayores aliados para dar con la empresa adecuada.
Confiar este día a una gran firma es éxito asegurado. Y en el recuerdo quedará este gran momento.
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